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Las olas disruptivas de la tecnología actual: ¿oportunidad o burbuja?

¿Representa la corrección bursátil experimentada por muchas empresas tecnológicas tras la pandemia una oportunidad de la que podríamos beneficiarnos o estamos ante el estallido final de una nueva burbuja?

Una tímida recuperación de sus principales índices bursátiles a comienzos de año ha avivado en el sector tecnológico las esperanzas de volver a la senda de crecimiento sostenido iniciada hace una década, tras la anomalía que ha supuesto 2022, un año que ha acarreado fuertes pérdidas a la industria y que culminó con despidos masivos en las principales bigtech.

En este contexto, no cabe duda sobre la pregunta que se hacen muchos inversores: ¿representa la corrección bursátil experimentada por muchas empresas tecnológicas tras la pandemia una oportunidad de la que podríamos beneficiarnos o estamos ante el estallido final de una nueva burbuja?

El sector tecnológico se caracteriza por cambios continuos impulsados por la innovación. Muchas olas de innovación tecnológica, como la llegada de la radio, la televisión, los ordenadores personales, Internet y los teléfonos inteligentes, ya han cambiado la vida de miles de millones de personas. Vincent Mercadier, gestor de fondos de Amiral Gestion, nos habla de algunas de las tendencias actuales que cree que están configurando el panorama tecnológico hoy en día.

“Tras el reciente lanzamiento de ChatGPT y DALL-E, ambos desarrollados por OpenAI, la inteligencia artificial es más popular que nunca. Dentro de nuestra cartera de empresas, Alphabet, Meta y Microsoft se están posicionando para ser líderes en IA. Alphabet, por ejemplo, ha sido una de las pioneras, desarrollando tanto infraestructura como software. Su Unidad de Procesamiento Tensorial (TPU), un chipset de aplicación específica, optimizado para el aprendizaje automático de redes neuronales, se desarrolló por primera vez internamente en 2015 y luego se puso a disposición de terceros en 2018 a través de la suscripción en la nube.

Esta combinación de hardware y software accesible en Google Cloud facilita y hace más eficiente la investigación en IA para los científicos de datos y las empresas. Alphabet también está utilizando la IA para desarrollar un coche de conducción autónoma en su filial Waymo, y ya ha transportado a personas a lo largo de millones de kilómetros en las ciudades de Phoenix y San Francisco. Meta, antes conocida como Facebook, también es un actor clave en la IA, ya que la empresa la utiliza cada vez más para recomendar contenidos a los usuarios de su red social y su aplicación de mensajería”.

Según Mark Zuckerberg, “la gente recurrirá cada vez más a motores de descubrimiento basados en IA para entretenerse, aprender cosas y conectarse con personas que comparten sus intereses.” Por lo que respecta a Microsoft, recientemente ha entrado a formar parte de la vanguardia de la IA invirtiendo 1.000 millones de dólares en el laboratorio de investigación OpenAI, que ha acaparado la atención recientemente con el lanzamiento de ChatGPT, una IA capaz de conversar con humanos en lenguaje natural, y DALL-E, que puede dibujar y crear imágenes como lo haría un artista o un diseñador.

Durante la crisis del covid la gente estaba confinada en su casa. Como consecuencia, cuando los consumidores no tenían acceso a las tiendas, el comercio electrónico ha visto cómo se disparaba su adopción. Aunque este cambio ya se estaba produciendo desde mucho antes de la pandemia, creemos que aún está en sus inicios y que seguirá influyendo en muchos negocios en la próxima década. Varias de las empresas de nuestra cartera están bien posicionadas para el paso del comercio físico al comercio electrónico, como PayPal, una plataforma de pago digital bidireccional que facilita los pagos en línea a consumidores de todo el mundo,prestando servicio a más de 392 millones de cuentas activas de consumidores y 34 millones de cuentas de comercios activas en más de 200 mercados. Por otro lado, la computación en nube es otra ola de innovación tecnológica que está transformando la forma de operar de los departamentos de IT de todas las empresas del mundo.

Los servicios de infraestructura en la nube permiten a las empresas alquilar, en lugar de construir, una infraestructura informática con potencia de cálculo, almacenamiento de datos y capacidades de red, lo que resulta más eficiente y sencillo para la mayoría de las empresas. En el pasado reciente, las empresas tenían que construir sus propios centros de datos comprando terrenos, y equipos, así como el software necesario para las bases de datos, el servicio de directorio y la gestión de dispositivos, por no hablar del personal informático necesario para su gestión y mantenimiento.

Dentro de nuestra cartera de empresas, Arista Networks, Microsoft y Alphabet son líderes en este ámbito. Microsoft Azure y Google Cloud Platform son los actores número 2 y 3 respectivamente en el sector de la infraestructura en nube, con una cuota de mercado combinada cercana al 30% de este mercado de 200.000 millones de dólares que crece a un impresionante 40-50% anual.

Además de los temas mencionados, la realidad virtual y alternativa podría ser otra oleada de innovación que ofrecería una experiencia más inmersiva que la que es posible con los dispositivos actuales, aunque se encuentra en una fase mucho más temprana que las anteriores. No obstante, es interesante observar que varias grandes empresas como Apple, Meta (con Oculus), Activision (con sus videojuegos multijugador en línea) y Microsoft (con HoloLens) ya se están posicionando para convertirse quizá en actores clave en este ámbito.

“Un lector atento empezará a observar una tendencia: los mismos nombres aparecen una y otra vez. Las mejores empresas tecnológicas son las que son capaces de pasar de una ola de innovación tecnológica a la siguiente. Un aspecto negativo que algunas de estas empresas tecnológicas podrían haber tenido en el pasado era su precio, pero gracias al colapso del sector tecnológico de 2022 este problema podría haberse resuelto en su mayor parte”, concluye Mercadier.

Citywire