Omaha, el epicentro de los inversores | Expansión
Omaha volvió a convertirse un año más, en el epicentro de la mayor concentración de inversores del mundo. El poder de convocatoria de Buffett (91) y Munger (98) sigue sorprendiendo y fascinando a la comunidad inversora, y la magnitud del conglomerado en que se ha convertido Berkshire Hathaway, cuyo valor excede los 761.000 millones de dólares, tienen gran parte de culpa.
Tras dos años de ausencia de público a la famosa Junta General de Accionistas por culpa de las restricciones del Covid-19, la ciudad de Nebraska acogió a cerca de 40.000 accionistas venidos de todo el mundo. "Cuando las dos personas que gestionan tu compañía tienen 91 y 98 años tienes derecho a verlos en persona cada cierto tiempo", bromeó Buffett. Desde hace años se puede seguir cómodamente por streaming, aunque en vivo, igual que en un buen concierto, se disfruta mucho más la experiencia.
Dentro del Century Link de Omaha se dejaron ver celebridades como el actor Bill Murray, ejecutivos como el consejero delegado de Apple Tim Cook y multimillonarios como Bill Gates, amigo personal de Buffett desde 1991 y antiguo consejero de la compañía (dimitió en 2020). No debe extrañar ver a Cook entre los asistentes, teniendo en cuenta que la participación de Berkshire en Apple es la mayor de todas sus participaciones cotizadas. Berkshire comenzó a invertir en Apple en 2016, y con cerca de $31.100 millones invertidos su posición vale hoy alrededor de 161.000 millones de dólares
Buffett no defraudó y arrojó jugosos titulares. En primer lugar, reconoció haberse equivocado en términos market timing cuando se produjo la crisis del Covid-19, pues no supo aprovechar las caídas para poner a trabajar toda la liquidez de Berkshire, que estaba en máximos históricos. El mayor anuncio de la jornada fue precisamente la inversión de $51.000 millones en lo que llevamos de año, cerca de un tercio de toda la liquidez, que ahora ronda los $106.000 millones. Esto contrasta drásticamente con el 2021, por ejemplo, año en el que apenas invirtió 7.000 millones de dólares. Buffett reconoció haber invertido en las dos primeras semanas de marzo cerca de 40.000 millones de dólares, aprovechando las caídas de mercado. "Buscamos negocios que hasta personas seniles puedan gestionar", afirmó para explicar su preferencia por negocios fáciles de operar. Las grandes inversiones en lo que va de año han sido varias. Destaca por encima de todas su apuesta por dos petroleras: Chevron (en la que ha invertido más de 21.000 millones de dólares) y Occidental Petroleum (de la que ha comprado 6.000 millones de dólares en acciones y donde ya tenía 10.000 millones de dólares en acciones preferentes).
Ante las preguntas sobre la inflación, uno de los temas candentes para inversores en cualquier lugar del mundo en los tiempos que corren, Buffett mostraba cierta preocupación: "Es extraordinario lo que hemos visto. El gobierno ha transferido mucho dinero a la gente, en algún momento el dinero deja de valer tanto como lo hacía antes." Lo cierto es que la impresión monetaria por parte de la Reserva Federal no tiene precedentes en sus 111 años de vida, y basta una estadística para confirmarlo: el 80% de todos los dólares jamás creados tiene menos de 24 meses de vida. La inflación afecta a todo el mundo, desde al bonista hasta la persona que lo guarda debajo de la almohada. "Si imprimes mucho, el dinero va a valer menos. Pero no nada." El tribalismo y la polarización política también es algo que le preocupa. Advierte que la última vez que percibió a la sociedad estadounidense tan polarizada fue cuando Roosevelt era presidente y Buffett era aún un niño.
Munger tampoco defraudó con su estilo directo e irreverente. Sentenció que la locura vivida en los mercados le parecía que no tenía precedentes. "Tenemos a gente especulando en acciones siendo asesorados por brokers que saben aún menos que ellos." La inversión de corto plazo (trading) y el auge del uso de derivados así lo corrobora. Robinhood, la app más usada desde el inicio de la pandemia para invertir de forma especulativa en Estados Unidos ha visto su valoración pasar de 60.000 millones de dólares el pasado agosto a apenas 8.500 millones de dólares la semana pasada, fruto de la caída en las operaciones por parte de su base de clientes. Parece que la euforia bursátil ya se ha purgado parcialmente. Sobre China, país que Munger admira y conoce en profundidad, gracias en parte a su cercanía con el inversor Li Lu, Munger reconoció que los inversores de Estados Unidos están cada vez más preocupados por el gobierno y que ha habido tensiones importantes.
Un año más, Greg Abel (quien está llamado a ser consejero delegado de la compañía cuando Buffett deje el cargo) y Ajit Jain (responsable del gigantesco negocio asegurador) tomaron la palabra durante la jornada. Jain confesó en la respuesta a una pregunta sobre la exposición de Berkshire ante un posible ataque nuclear, que desconoce la exposición real que tendría la compañía ante tal evento.
También tuvieron ocasión de hablar sobre bitcoin y, una vez más, su contundencia fue máxima: "Si me ofrecieran todo el bitcoin del mundo por 25 dólares, no lo aceptaría. Para que los activos tengan valor, tienen que producir algo", sentenció. El oro, tan denostado por Buffett y Munger durante su carrera no produce nada y tiene un valor agregado de 12 billones de dólares, diez veces el PIB de España. ¿Yerra el mejor inversor de la historia al no entender la diferencia entre los activos financieros y los monetarios? El tiempo lo dirá, pero sin duda su olfato en inversiones (financieras) sigue siendo excelente, y si no, vean la gráfica adjunta. La inversora más growth y tech (la liebre) del mundo siendo alcanzada por el nonagenario Buffett (la tortuga). Poesía pura.
Pablo Martínez Bernal, Head of Sales para Iberia en Amiral Gestion